1. La magia de las horas de sueño

El sueño es como una poción mágica para tu cuerpo. Debes dormir entre 7 y 9 horas cada noche. Si duermes menos, te convertirás en un troll gruñón. Si duermes más, podrías volverte un elfo despistado. ¡Encuentra tu equilibrio!

2. El ritual antes de dormir

Antes de acurrucarte en tu nido, sigue estos pasos:

  • Apaga las pantallas: La luz azul es como un dragón que te roba el sueño. Apaga el móvil, la tablet y la tele.
  • Infusión de unicornio: Prepara una taza de té relajante con manzanilla o lavanda. Añade un toque de polvo de estrellas (opcional).
  • Ropa cómoda: Ponte tu pijama más suave. Si tienes un pijama de unicornio, ¡mejor aún!

3. La cama mágica

Tu cama es como un portal a otro mundo. Asegúrate de:

  • Colchón cómodo: Si tu colchón es más viejo que el abuelo de Gandalf, considera cambiarlo.
  • Sábanas de algodón: Las sábanas suaves son como un abrazo de hadas. Evita las sábanas de papel de lija.
  • Almohadas mullidas: Las almohadas son como las alas de un grifo. Asegúrate de tener suficientes.

4. El hechizo del silencio

El silencio es como una varita mágica para el sueño profundo. Usa tapones para los oídos si tienes vecinos ruidosos o un dragón que ronca al lado.

5. Sueños de arcoíris

Cuando cierres los ojos, imagina un mundo lleno de arcoíris, unicornios y bosques encantados. ¡Deja que tus sueños vuelen como las alas de un pegaso!

En resumen

Dormir bien es como encontrar un tesoro escondido. Así que, querido lector, cierra los ojos, cuenta ovejas y que tus sueños sean tan épicos como una saga de Tolkien.