¿Te imaginas que el calor extremo tenga preferencias geográficas? Pues sí, según un estudio reciente, el calor se toma su tiempo para decidir dónde golpear más fuerte. 🌡️

La investigación

Un grupo de científicos intrépidos se puso las gafas de sol y se lanzó a investigar por qué el calor extremo afecta de manera diferente a distintas regiones. Descubrieron que, en Asturias, el calor es como ese amigo que llega sin avisar y se queda a dormir en tu sofá durante semanas. En cambio, en Córdoba, el calor es más como un visitante educado que se presenta, toma un té y se va antes de que puedas decir “termómetro”.

El dato curioso

¿Sabías que las temperaturas extremas afectan más a los asturianos que a los cordobeses? Parece que el calor se siente más cómodo en el norte de España. Tal vez porque allí puede disfrutar de la lluvia y las verdes praderas mientras hace de las suyas. En Córdoba, en cambio, el calor se enfrenta al desafío de las altas temperaturas y los abanicos en modo turbo.

Consejos para sobrevivir al calor

  1. Asturias style: Si vives en Asturias, abraza la humedad y conviértete en un experto en llevar paraguas. No te preocupes si no llueve, ¡siempre puedes usarlo como sombrilla!
  2. Córdoba style: Si estás en Córdoba, abanícame despacito. Los abanicos son tu mejor amigo. Además, puedes usarlos para crear una coreografía improvisada al ritmo de las olas de calor.

Conclusión

En resumen, el calor extremo no tiene fronteras, pero sí tiene preferencias. Así que, ya sea que vivas en Asturias o en Córdoba, recuerda hidratarte, buscar sombra y, sobre todo, no te pelees con el termómetro. ¡Es un enemigo silencioso pero poderoso!