El productor y exmiembro de Mecano ha sido detenido este martes por presunta contratación ilegal de inmigrantes


El productor musical y exmiembro de Mecano, Nacho Cano, defendió su inocencia horas después de ser puesto en libertad con cargos por presunta contratación ilegal de inmigrantes para su musical Malinche. “El criminal no soy yo, es la Policía, es a los que hay que investigar”, aseguró el músico y promotor teatral. Cano afirmó que todo se debe a su afinidad política, ya que no es “de izquierdas ni comunista” y es “amigo de Ayuso”.

Acusaciones y declaraciones

“Si van a por mí, van a por Ayuso”, proclamó Cano en una rueda de prensa rodeado de los 17 integrantes de su musical investigados por presunta contratación ilegal. “Si me encuentran muerto en la cuneta, ya sabéis quién ha sido”, añadió el artista. Cano acusó a las fuerzas policiales de seguir “una maniobra orquestada” y de haber querido “achantar” y “coaccionar” a parte de la plantilla de su musical Malinche.

Cano criticó la actuación de la Policía, calificándola de “claramente deplorable”. Según él, todo responde a una maniobra orquestada para desviar la atención de la imputación de la esposa del presidente del Gobierno. “Claramente, hay que llevar la atención a algo que no sea la imputación de la mujer del presidente del Gobierno y como Nacho Cano se atreve a decir que no es comunista ni de izquierdas, porque no lo soy porque no soy idiota porque he viajado”, afirmó. “En la agenda está ir a por mí, porque si van a por mí también van a por Ayuso, pero en el camino te llevas a los 17 con su ilusión, su historia y todo”.

Detención y acusaciones

Cano vinculó al inspector jefe de la Policía con el Ministerio del Interior, señalando que su detención fue “de 10 minutos” para, según él, hacerle “la foto” y filtrarla a los medios de comunicación, concretamente a la SER y El País. Además, Cano sugirió que el comisario jefe de la comisaría de Leganitos, Alberto Carba, está muy supeditado a Fernando Grande-Marlaska, ministro del Interior.

Según su relato, hace dos semanas aparecieron 12 policías para interrogar al resto de participantes en el programa, queriendo “achantarles” durante su interrogatorio, que duró “desde las 2 de la tarde hasta la 1 de la mañana, con coacción”. Cano denunció el trato recibido en la comisaría donde se le tomó declaración y vinculó su detención con el Ministerio del Interior y el comisario jefe de la comisaría de Leganitos.

Cano fue puesto en libertad tras prestar declaración y ha sido denunciado como autor de delitos contra los derechos de los trabajadores y de favorecimiento de la inmigración irregular, según fuentes policiales.